Se conoce la heterogeneidad con que se usan y calculan los términos financieros. La dificultad para compartir un lenguaje financiero común que facilite comprender de qué va. Es frecuente que empresas diferentes usen expresiones distintas para denominar un mismo concepto y si usan el mismo término lo refieran a conceptos desiguales. En este galimatías, que solo genera confusión y error, participan incluso empresas con direcciones financieras muy solventes. Revisemos la información reciente publicada por empresas cotizadas del mercado español. Hoy vamos a hablar de diferentes conceptos de este tipo, entre ellos el endeudamiento la rentabilidad financiera.
Para muestra un botón
Una metalúrgica controla la estructura de capital en base a diferentes ratios como el de endeudamiento definido como la relación entre la deuda financiera neta y los fondos propios de la sociedad.
Una papelera calcula el índice de apalancamiento como la deuda neta dividida entre el patrimonio neto.
Una eléctrica realiza el seguimiento del capital de acuerdo con el ratio de apalancamiento, que calcula como la deuda financiera neta dividida entre el patrimonio neto más la deuda financiera neta.
Para una constructora el apalancamiento es la deuda neta total entre patrimonio neto.
El ratio de endeudamiento de la metalúrgica se calcula casi igual que el denominado apalancamiento por la papelera. La eléctrica emplea el término apalancamiento, pero lo calcula de manera diferente a la papelera. La constructora usa patrimonio neto donde la metalúrgica emplea fondos propios.
Ni siquiera hay consenso en la rentabilidad financiera del negocio
La rentabilidad financiera es un indicador clave para evaluar cualquier empresa por lo que debería tener un estándar. Sin embargo, encontramos diferentes acepciones. En el numerador se puede usar, según criterios, el beneficio de explotación antes o después de impuestos o el beneficio neto. En el denominador el activo total, el activo neto o el activo neto operativo. Por ejemplo, si se divide el beneficio neto entre el activo total un valor del 2% puede ser excelente si la empresa está muy endeudada. Si el cociente entre el beneficio de explotación y el activo neto operativo alcanza el 8%, la rentabilidad financiera puede ser muy poco atractiva si la empresa está poco endeudada.
Algunos dicen que solo se gestiona lo que se puede medir
¿Pero qué gestión puede hacerse bien si se equivoca la métrica? La rentabilidad financiera y el endeudamiento son dos áreas clave para evaluar cualquier empresa, pero la heterogeneidad de conceptos y cálculos confunde a la hora de juzgarlas. Aunque, como debe hacerse, se indique cómo se calcula. Por ejemplo, el apalancamiento de 1 (100/100) calculado por la papelera se convierte en 0,5 calculado por la eléctrica (100/200).
Un poco de orden, por favor
Tanta diversidad exige al responsable financiero detallar junto al nombre del ratio su significado. Al analista externo, revisar cómo calcula cada ratio cada empresa. Se precisa un poco de orden. Mientras decide hacerlo la Real Academia de turno, que haberla hayla, el Máster en Dirección Financiera online con clases en directo que impartimos junto a Next IBS te ayudará a comprender los términos de las finanzas. A cómo calcularlos para medirlos y gestionarlos correctamente. Para entenderte sin ambigüedades en la Torre de Babel de las finanzas, porque solo quien comprende resuelve lo que ignora.